Una empresa familiar se define como una compañía en la que sus directivos está integrado por los miembros de una familia, principalmente por el padre-madre/hijo. Aunque con la crisis, las empresas familiares están siendo lideradas por matrimonios como alternativa al autoempleo.

 

Un 55% en España, sobreviven una segunda generación como empresa privada. Las que duran más de cuatro generaciones son muy organizadas y sofisticadas, tanto en administración como en el rol de los dueños, la clave está en tener a la cabeza directiva a un miembro no familiar.

 

La puesta en marcha de una empresa familiar no es un camino fácil, la familia apuesta todo por una idea nueva que debe materializar, saber los riesgos a que se enfrenta su nuevo negocio, la competencia, el canal de comunicación fluida entre los miembros de una familia para el bienestar común, la conciliación familiar, en todo su conjunto, es un reto.

 

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